En el vasto y sereno corazón de Utah, donde el frío invernal pinta de blanco las cumbres y el aire se llena de la pureza de la montaña, se encuentra Deer Valley, un refugio donde el tiempo parece detenerse, suspendido en una quietud que invita a soñar. Como una joya oculta entre las laderas, este destino no es solo un paraíso para los amantes del esquí, sino un santuario donde la naturaleza y la elegancia se encuentran en perfecta armonía. Aquí, cada copo de nieve parece un susurro del cielo, un delicado regalo de la tierra que cubre el mundo con su manto inmaculado.

Las montañas de Deer Valley son majestuosas en su capacidad de contar historias, de hablarnos en cada rincón cubierto de nieve. Cuando me deslizo por sus pistas, el crujir de los esquís sobre la nieve es como una melodía antigua que se mezcla con el aire fresco de la montaña. Es un suspiro del paisaje, una caricia silenciosa que invita a entregarse a la quietud del momento, donde la belleza parece detener el paso del tiempo.

Este paraíso invernal cobra vida de una manera única al llegar a las Stein Eriksen Residences, un lugar que trasciende lo terrenal para convertirse en un santuario suspendido entre el cielo y la tierra. El acceso directo a las pistas, esa comodidad de ski-in y ski-out, me permite sentir la cercanía de las montañas con una intensidad que pocas veces se experimenta. Solo unos pasos me separan del polvo blanco y suave que cubre el mundo, mientras el aire frío y puro de las alturas llena mis pulmones con su frescura revitalizante.

El lujo en Stein Eriksen Residences es seductor y sutil, como la naturaleza misma que rodea este lugar. Premiado como el Mejor Hotel Boutique de Esquí 2024 por los World Ski Awards, este refugio es un testamento de elegancia y sofisticación. Aquí, la verdadera opulencia se encuentra en la forma en que el diseño y el entorno se fusionan sin esfuerzo, creando una atmósfera que invita a la contemplación y al descanso profundo. Cada rincón de la residencia está pensado para rendir homenaje a la grandeza de las montañas, con materiales naturales y una fluidez que parece emular la misma serenidad del paisaje exterior.

Mi residencia de dos cuartos es un poema de confort y belleza. Cada detalle, desde los acabados en madera hasta la disposición del espacio, está diseñado para ofrecer una experiencia sensorial completa. La terraza privada, con su jacuzzi al aire libre, se convierte en un espacio de conexión profunda con el entorno. Mientras el agua caliente acaricia mi piel, la vista de las montañas nevadas me envuelve en una sensación de calma infinita. Es un refugio donde el alma respira y el tiempo parece desvanecerse en la quietud.

La cocina, moderna y funcional, invita a ser explorada, pero es en la mesa donde la magia realmente sucede. Sentarse a disfrutar de una comida rodeado de las vistas más hermosas del mundo, con el brillo de la nieve como telón de fondo, convierte cada plato en una celebración de la vida. La serenidad de la madera y el diseño impecable del comedor hacen que cada bocado sea una obra de arte, un pequeño tributo a la belleza de la naturaleza que me rodea.

El spa de Stein Eriksen Residences es un templo de bienestar, un santuario de paz donde el contraste entre el aire gélido de la montaña y el calor envolvente de la alberca al aire libre me transporta a un estado de relajación profunda. El agua, caliente como un abrazo, se mezcla con el viento frío y la nieve que cae suavemente, creando una sinfonía de sensaciones que rejuvenecen tanto el cuerpo como el espíritu. Y en el jacuzzi, rodeado por el susurro del viento y el crisol de montañas blancas, me entrego al silencio absoluto, a la serenidad que solo un lugar como este puede ofrecer.

En el 7880 Club, la gastronomía se eleva a otro nivel. Cada plato es una obra maestra que fusiona lo mejor de los ingredientes locales con una creatividad sin igual. Aquí, cada comida es una experiencia sensorial, donde los sabores se mezclan con la majestuosidad del entorno para ofrecer un festín que nutre tanto el cuerpo como el alma.

Hospedarse en Stein Eriksen Residences es una experiencia que trasciende lo material. Es un refugio donde la grandeza de las montañas se encuentra con la comodidad del hogar, donde cada día se convierte en una oportunidad para desconectar del mundo exterior y sumergirse en la paz profunda de un paraíso nevado. Aquí, en este rincón sagrado de Utah, cada respiro se convierte en una celebración de la vida y la naturaleza, un homenaje a la majestuosidad que nos rodea.

Deer Valley, con su manto blanco y sus montañas imponentes es una promesa de belleza inmaculada, un lugar donde el espíritu encuentra su calma, y donde la majestuosidad de la naturaleza se convierte en una invitación a la reflexión y al descanso. En el corazón de toda esta magia, Stein Eriksen Residences es el alma de este paraíso invernal, el refugio perfecto para aquellos que buscan un lujo auténtico, una conexión profunda con la naturaleza y una experiencia que queda por siempre plasmada en el alma.

STEIN ERIKSEN RESIDENCES
W. stainrs.com

APASIONADA DEL BUEN VIVIR