Viajar por Alaska es una experiencia única que ofrece paisajes espectaculares, vida salvaje abundante y una sensación de aventura en cada rincón. Esta vasta región, con su naturaleza salvaje y su cultura rica, es un destino que atrae a viajeros que buscan escapar de las rutas turísticas convencionales y sumergirse en la majestuosidad de uno de los lugares más remotos del planeta.

El viaje por el Inside Passage a bordo de un crucero de Crystal Cruises fue una experiencia que me conectó profundamente con la naturaleza y la cultura de Alaska. Esta travesía me llevó a través de un paisaje de islas serenas y canales profundos, donde cada curva revelaba una nueva maravilla de la naturaleza.

Desde imponentes glaciares y montañas nevadas hasta serenos fiordos y exuberantes bosques, cada día a bordo de un crucero Crystal ofrece nuevas oportunidades para descubrir maravillas naturales. Mi odisea en este mágico destino comenzó en Ketchikan, una pintoresca ciudad costera conocida por su vibrante cultura indígena y su entorno natural impresionante. Rodeada de bosques densos y bañado por las aguas del estrecho de Behm, Ketchikan es famosa por su rica historia de pesca, su arquitectura histórica y sus coloridos totems que reflejan la herencia de los pueblos nativos Tlingit, Haida y Tsimshian.

Ketchikan es famosa por ser la «Capital Mundial del Salmón», y la pesca es una parte esencial de su identidad. Durante los meses de verano, la pesca deportiva de salmón atrae a pescadores de todo el mundo. Además, la industria pesquera ha sido una columna vertebral de la economía local durante décadas.

Una de las atracciones más emblemáticas de Ketchikan es Creek Street, una pintoresca pasarela de madera construida sobre el arroyo Ketchikan. En el pasado, Creek Street era el distrito rojo de la ciudad, famoso durante la época de la Ley Seca. Hoy en día, sus coloridos edificios albergan tiendas de artesanía, galerías y museos que narran la historia de la ciudad.

Continuamos con un ‘scenic cruising’, disturbando de espectaculares vistas panorámicas desde la comodidad del barco. En el majestuoso Tracy Arm y Endicott Arm de Alaska, los panoramas son simplemente impresionantes. Estos fiordos glaciares, situados en el sureste del estado, se caracterizan por sus paredes escarpadas y sus aguas cristalinas que reflejan el azul profundo del hielo. Los glaciares que descienden desde las montañas hacia el mar ofrecen un espectáculo visual espectacular, con enormes icebergs flotando y cascadas que se precipitan hacia las aguas tranquilas.

La oferta gastronómica a bordo de Crystal Serenity consiste una exquisita variedad culinaria que satisface incluso a los paladares más exigentes. El restaurante Umi Uma, es una joya culinaria que eleva la experiencia de crucero de lujo. Dirigido por el chef Nobu Matsuhisa; este restaurante ofrece a los pasajeros la oportunidad de deleitarse con su fusión única de cocina japonesa tradicional y sabores peruanos. La elegante y sofisticada atmósfera complementa los exquisitos platos, que incluyen el famoso Black Cod Miso y el Yellowtail Jalapeño de Nobu. Con una meticulosa atención al detalle y una dedicación a utilizar los ingredientes más finos, cenar en Nobu en Crystal Cruises no es solo una comida, sino un viaje gastronómico memorable que deleita los sentidos y enriquece la experiencia general de viaje.

Viajar a Alaska es embarcarse en una aventura inolvidable en un lugar donde la naturaleza domina y la civilización parece lejana. Con su belleza salvaje y su rica cultura, Alaska es un destino que promete experiencias memorables para aquellos dispuestos a explorar su vastedad y descubrir sus secretos.

APASIONADA DEL BUEN VIVIR