Nacida como una celebración culinaria, la comida japonesa kaiseki es más que platillos bellamente servidos. Sus orígenes se encuentran hace muchos siglos en las comidas sencillas que se servían en la ceremonia del té, pero luego evolucionó hasta convertirse en un estilo de cena elaborado popular entre los círculos aristocráticos, y actualmente la podemos disfrutar en Asai Kaiseki, un restaurante que nos presenta bellamente la cultura y los sabores de Japón. 

Siguiendo el principio de hacer que los comensales se sientan especiales y que prueben sabores exquisitos, el chef Yasuo Asai se esfuerza por alcanzar la excelencia en cada detalle. Meticulosamente preparados y exquisitamente servidos, los platillos que se sirven en su restaurante ofrecen una experiencia que va más allá de las sensaciones: están preparados para crear recuerdos duraderos.

En Asai Kaiseki, el único restaurante de su tipo en México, el chef Yasuo continúa dando vida a una de las tradiciones culinarias más antiguas de su natal Japón, adhiriéndose a la herencia centenaria que se ha conservado a través de generaciones, y a la que ha enriquecido con la integración de nuevas técnicas e innovaciones. Con su experiencia y creatividad, ha logrado integrar ingredientes mexicanos a los platillos, como en el sushi de erizo de Ensenada; sashimi servido con rodajas de rábano; ramen con carnitas, caldo de soya y huevo revuelto; sopa clara con oastel de elote y camarón, preparada con flor de calabaza y aguacate; la fusión de wagyu, la carne más fina y delicada, con los muy apreciados escamoles; y hasta unos refrescantes raspados de mango, lichy o mezcal. 

El restaurante se ubica en una de las zonas más bonitas de la ciudad, muy cercano al Museo Soumaya, Antara y a importantes vías, y por estar cubierto con ventanales de piso a techo, la luz natural, los rayos del sol y hasta la lluvia, le dan un toque encantador a cada momento, además cuenta con mesas al aire libre. La decoración con madera y macetas nos remonta a Nagoya, la ciudad natal del chef, convirtiendo la experiencia gastronómica en una aventura de inmersión cultural, y para quienes busquen celebrar momentos especiales, también cuenta con un salón privado.  

Su barra es el lugar perfecto para disfrutar de un menú a partir de seis tiempos, pues desde la comodidad de nuestro asiento se puede ver cómo preparan los platillos, se da la explicación de cada uno, e incluso se propone la manera de consumirlos. El chef selecciona ingredientes de temporada, destacando las texturas, colores y porciones servidas con la armonía de una bella pintura. 

Otro de los grandes sellos del restaurante, es que el chef Yasuo está presente para darle la bienvenida a sus comensales, para recomendar platillos, y por supuesto, para prepararlos, lo que garantiza que se disfrute de una experiencia de altura.

APASIONADA DEL BUEN VIVIR