Así como la música sinfónica es una experiencia auditiva o los tratamientos de spa son una delicia para el cuerpo, disfrutar de un platillo exquisito en un ambiente elegante es el epítome del significado del arte del fine dining, uno que se vive con todos los sentidos en un momento creado únicamente para cada comensal. Disfrutar en un ambiente de gusto refinado, donde los platillos son preparados con el mayor detalle, es una de las experiencias que ofrece JW Marriott Cancún Resort & Spa, donde cada uno es presentado con esmero y tratado como una auténtica obra de arte.

En los restaurantes del Resort no se trata sólo de comer, sino de tomarse el tiempo para saborear y descubrir lentamente, para que con cada bocado los ingredientes desplieguen sus secretos. Si los platillos son las obras de arte, nosotros somos los artistas que los llenamos de vida y los cargamos con las emociones que nos generan, en conjunto con el entorno fascinante creado para cada uno de los restaurantes.

Con su amplia oferta gastronómica, JW Marriott Cancún Resort & Spa nos lleva a un viaje de sabores alrededor del mundo, desde la aclamada cocina española en el restaurante Bravío; pasando por nuestra querida comida mexicana en La 16 Speakeasy; la perfumada comida tailandesa en Sasi Thai; los más deliciosos sabores italianos en Gustino; las tapas de Bella Candela’s de Gustino; terminando con creativas ofertas de cócteles artesanales del menú 150 Margaritas del JW Lobby Bar.

Inspirado en la rica gastronomía de las diferentes regiones de España, Bravío nos ofrece una rica selección de tapas, patatas bravas, dátiles rellenos de queso de cabra, almendras, salsa de manzana y mostaza; gambas al ajillo; cortes como el tierno solomillo de ternera a la Navarra acompañado con salsa de piquillo confitado y papas ahumadas; cordero a la Brasa; pollo al Jerez con relleno de hongos silvestres, verduras rostizadas y salsa de jerez; además del afamado bacalao a la Vizcaína y del pulpo a la parrilla con su tinta.

Con pastas frescas hecha en casa y pizzas cocidas en horno de piedra, Gustino Italian Grill es un sitio para pasar momentos íntimos en compañía de las notas del saxofón. Con sus vistas al mar, la pasta Bavette di Mare con langosta del Caribe, camarón, almeja chirla y mejillones en salsa de vino Sauvignon Blanc sabe a paraíso, y para los amantes de la carne pero con un toque muy italiano, el Filetto di Manzo de res prime Black Angus con risotto de porcini y portobello, es una delicia. 

Sasi es un recorrido por la auténtica comida tailandesa, en un ambiente relajado junto a la playa y cerca del atardecer. Los famosos rollos primavera de pollo o vegetarianos, el satay de cerdo, pollo o camarón, los dumplings rellenos de carne de cerdo o camarón, además del curry rojo, verde o amarillo, son un viaje hasta el lejano oriente en un mar de sabores. Con más de 150 sabores de margaritas, las risas encuentran su lugar ideal en el Lobby Bar, donde se pasan los momentos más divertidos dentro de un ambiente jovial. 

No hay nada más placentero que saborear unos fideos, una pizza, unas tapas, sopas, empanadas, cortes de carne, pescado, arroces, y los postres más alucinantes, acompañados del servicio excelente que caracteriza a los hoteles JW Marriott. En sus restaurantes, los chefs preparan cada uno de los platillos con amor y dedicación.Al entrar a cualquiera de estos recintos lo único que debemos hacer es dejarnos llevar por el momento, apreciar del arte sublime nacido de la imaginación y la creatividad de los chefs, y tener la disposición de vivir un momento que fluye a nuestro tiempo y al ritmo de los sabores, aromas, formas y texturas.

APASIONADA DEL BUEN VIVIR