En amplia convivencia con el frondoso bosque de Avándaro y a corta distancia de lago de Valle de Bravo encuentra uno un paraje inimaginable que invita a dejarse envolver por el remanso de paz, armonía con naturaleza y comodidad plena que ofrece Fisher’s House Hotel & Spa. Entre las serpenteantes veredas de esa pequeña comunidad campirana se topa uno con este lugar que representa lo que más anhelamos cuando buscamos unas vacaciones fuera de lo convencional y realmente de descanso total. Cuando queremos alejarnos de la rutina, la agitación urbana y simplemente vivir unos días sin prisa, a nuestras anchas, consintiendo al cuerpo y al espíritu, este es el destino ideal.

Es el escape perfecto de fin de semana, con sólo siete habitaciones completísimas en servicios y confort, que están listas y a la medida para cautivar al viajero más conocedor con un estilo arquitectónico contemporáneo y a la vez armónico con el entorno. 

Cada una asemeja pequeñas unidades o islotes en un mar de vegetación profunda que les rodea y circunda entre varios jardines y prados que hacen más hermosa aún la vista desde el balcón y terrazas privadas, donde además se puede disfrutar de un relajante jacuzzi exterior.

Enormes ventanales panorámicos de piso a techo permiten la entrada de los rayos del sol tenuemente conforme avanza el día y por la noche la chimenea interior crea una atmósfera cálida, indulgente, acogedora y, sobre todo consentidora. Se conjugaron materiales como concreto, piedra natural y mucha madera para lograr ese ambiente íntimo, elegantemente sencillo y pulcro. 

Tecnología de punta aplicada en iluminación, bocinas de sonido, pantallas led, conectividad wifi avanzada y comunicación telefónica interna con acceso directo a concierge y recepción, son beneficios extra que se agradecen siempre y simplifican cualquier requerimiento o necesidad.

Las camas king size cuesta trabajo abandonarlas al despertar porque te apapachan y abrazan; pero una ducha tibia tipo lluvia y café a la mano para el primer toque de energía mañanero es la clave para empezar el día con sensación de gran bienestar, mientras te alistas para desayunar en el balcón o dirigirte al restaurante y disponerte a saborear un almuerzo más que goloso.

Panes hechos en casa, mantequilla confitada y mermeladas artesanales son sólo el comienzo de un festín que bien puede arrancar así o con la barra fresca del Oyster’s Bar, que durante el fin de semana ofrece almejas, ostiones, coctelitos de camarón, ostión, campechanos o pulpo, además de tostadas y aguachiles para escoger. Los antojos también te hacen pecar de gula, como el pozole de camarón, las quesadillas y gringas de pescado, la dobladita de pulpo o los chilaquiles, burritos y enchiladas con mariscos y camarón

Para comidas y cenas qué podemos decir, la experiencia de más de 32 años de ser anfitriones marca no sólo un servicio especial en calidad de productos e ingredientes, sino la conjunción de todo un estilo de vida Fisher’s que se traduce en esta nueva experiencia hotelera fresca e innovadora.

El proyecto culinario Fisher’s House encuentra su mejor exponente en este hotel con una propuesta culinaria cautivadora y golosa para cualquier paladar. Nos dejamos seducir por la barra de conchas, los aguachiles, cocteles, el King Crab, los carpaccios, la barra de sushi, los tacos y tostadas de mariscos diversos que son clásicos de la casa y los antojos. 

Desde luego, palabras mayores cuando hablamos de su cocina formal entre sopas regocijantes y renovadoras; los arroces en varias ediciones hasta orientales; las pastas, los sándwiches y desde luego, los cortes de pescado, los camarones, pulpos, pescados del día y hasta un auténtico bbq coreano.

Siguiendo la línea indulgente y del buen vivir, la escala obligada es vivir la experiencia del Spa que ofrece relajación total y bienestar para completar la misión. Los masajes son únicos y entre ellos puede uno elegir el de relajación con técnica suave ideal para eliminar el estrés; el deep tissue o masaje profundo que se enfoca en zonas específicas del cuerpo de técnica media-fuerte que es perfecto para la rigidez muscular. 

El masaje con piedras calientes para reactivar la circulación conjuga aceites esenciales para relajar y el exfoliante de cuerpo completo y aplicado con aromaterapia, deja la piel suave como pocas. También el sauna y el vapor son una delicia para disfrutar.

El hotel cuenta también con jardín con cupo hasta para 400 personas donde puedes realizar algún evento, con posibilidad de caterings externos que pueden usar la cocina de banquetes del hotel. Varios spots y rincones son marco ideal para una cena romántica o incluso en la propia habitación que puede ser montada con diferentes decoraciones según el tema.

Vivir la experiencia Fisher’s House Hotel & Spa no sólo es hospedarte en un lugar encantador, es dejarte llevar a un mundo de bienestar y relajación total donde el tiempo transcurre sin ninguna prisa y que revive el ánimo para el cuerpo, el alma y el capricho sibarita que todos llevamos dentro.

FISHER’S HOUSE HOTEL
W. fishershousehotels.com.mx

APASIONADO DEL BUEN VIVIR