LAS JOYAS DEL MAR EN BAJA CALIFORNIA SUR

Que el invierno sirva de pretexto para escapar a uno de los parajes más hermosos de México: Bahía Magdalena, a 280 kilómetros desde La Paz por la carretera Transpeninsular, en Baja California Sur.

Ahí, de diciembre a marzo, ocurre un singular espectáculo natural: cientos de cetáceos viajan desde América del Norte para aparearse o alumbrar a sus crías.

Para admirar de cerca este espectáculo natural hay que zarpar de los puertos Chale, San Carlos o López Mateos, pertenecientes al Santuario de la Ballena Gris.

Desde este último puerto siempre ventoso se les alcanza a ver incluso desde tierra, pues las ballenas nadan en la bahía, por lo que un viaje en lancha, de 15 minutos promedio, lleva prácticamente a su lado y sin salir a mar abierto.

La calidez de las costas mexicanas hace que migren ocho especies de ballenas, entre ellas la jorobada, la minke, bryde, sei, azul y gris, por lo que se convierte en uno de los atractivos más importantes de Baja California Sur, y una de las más inolvidables experiencias para los más curiosos viajeros. 

Los pescadores parecen ya no sorprenderse con estos animales, pero la realidad es que, como cada año, desde hace décadas, las reciben en la bahía, las tratan con familiaridad y aseguran incluso que reconocen a algunas, de ahí que las hayan bautizados con nombres como «La Manchada«, «La Cariñosa» o «La Cola Mocha«.

Hacia el norte del estado hay otros dos sitios imperdibles: las lagunas Ojo de Liebre y San Ignacio, ambas decretadas como refugio de ballenas y ballenatos, y pertenecientes a las Reserva de la Biósfera El Vizcaíno.

Para realizar los avistamientos de ballena gris bajo los protocolos de seguridad y sanidad pertinentes hay que contratar empresas que cumplan con los requerimientos y permisos solicitados por la Procuraduría Federal de Protección al Ambiente (PROFEPA), en coordinación con la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (CONANP) y la Secretaría de Marina Armada de México (SEMAR). A estos se les puede encontrar en https://golapaz.com/actividades/ballena-gris/

Y no hay que olvidar que la península de Baja California es una invitación permanente para adentrarse en el mar, pues se pueden avistar todo tipo de especies, desde jureles, tortugas y mantarrayas hasta lobos marinos, ballenas y tiburones, especialmente en esta temporada, así como aves residentes y migratorias.

El 80 por ciento de las especies marinas que hay en México se encuentra en el Golfo de California, por lo que su avistamiento es más fácil que en cualquier otra región, han señalado autoridades turísticas del estado. 

Tras avistar lomos, colas y hasta cabezas, surge la promesa de volver para ser de esos pocos que logran ver a una ballena completa fuera del agua, en un salto de júbilo en aguas sudcalifornianas