LOS VINOS DE RIOJA, UNIÓN DE PASIONES

Iniciarse en el mundo del vino requiere una dosis importante de interés y curiosidad, por lo que intentar maridar vino y música es un ejercicio que estimula todos los sentidos. Se dice que la música afecta la percepción y puede influenciar en el sabor que sentimos del vino, por lo que la música indicada para disfrutar mejor de los vinos de Rioja, es la del amor por esta tierra que queda atrapado en cada latido del corazón, y la del sonido del viento que recorre los vastos viñedos en los días soleados. 

Los vinos de Rioja son el resultado de la unión de pasiones, de la música de corazones que laten por un mismo objetivo: el de crear vinos fabulosos que dejen un buen sabor de boca y una huella en la memoria. Al ser la primera Denominación de Origen de España, y la primera en recibir la certificación de Calificada, Rioja ampara los vinos de sus bodegas productoras con un halo de calidad insuperable, que introduce a los principiantes en este maravilloso mundo, y que reafirma en los expertos su cariño por sus uvas. 

Esta tierra bendecida se distribuye en una región natural, con un clima y suelos excepcionales para la producción de vinos únicos en el mundo. La danza entre el clima atlántico y el mediterráneo, crea un ambiente propicio para la siembre de vides a lo largo de unos cien kilómetros en los márgenes del río Ebro, entre la delimitación de la Sierra de Cantabria por el norte y la Sierra de la Demanda por el sur. 

La DOCa Rioja es tierra de grandes tintos, rosados, espumosos y diferentes blancos, desde afrutados jóvenes hasta de larga guarda, elaborados con la diversidad de uvas autorizadas. Una de ellas es la variedad Viura, que ofrece vinos afrutados, con un aroma floral y con notable grado de acidez, ideal para elaboración tanto de jóvenes como de crianza.

A los vinos de Rioja los amamos no porque sean necesarios para la vida, sino simplemente por el placer que nos generan, como si cada botella fuera un nuevo amor que llega a nuestra vida llenándonos el alma estados de gozo, tranquilidad, alegría y sorpresa. Son vinos cargados de emociones y sabores, por eso, desde hace siglos esta región ha sido alabada como elaboradora de vinos de excelencia, y reconocida por su carácter pionero que no ha hecho sino crecer y consolidarse con el paso del tiempo.

Al estar flanqueada por los paisajes cautivantes de las majestuosas Sierra de Cantabria y Sierra de la Demanda, la región vinícola de Rioja está dotada de paisajes que nos roban el aliento. Junto a su diversidad vitivinícola, cada uno de los siete valles formados por los afluentes del Ebro tienen sus propios microclimas y diferentes tipos de suelos, que en conjunto le dan a las vides una estructura equilibrada para crecer ricas y jugosas. 

Como un susurro que resuena dulcemente, el nombre de Rioja evoca memorias de paisajes fascinantes, y sabores que llenan los sentidos con el calor de sus vinos. Entre las grandes creaciones de todos los tiempos están los vinos, efímeras joyas líquidas que nos regalaron los dioses para recordarnos, después de la primera copa, los deliciosos placeres sensoriales que da el ser mortales.

APASIONADA DEL BUEN VIVIR