EL SABOR DEL VERANO CON MOËT & CHANDON ICE IMPERIAL

El que estos tiempos sean diferentes no significa que el verano pierda su sabor, al contrario, es momento de reinventarlo y darle un toque muy especial desde casa. Moët & Chandon Ice Impérial y Moët & Chandon Ice Impérial Rosé, con la elegancia de esta gran maison y con sus burbujas coquetas, son nuestros cómplices y aliados para darle destellos de alegría al verano. 

La espontaneidad de ser el primer champagne que se toma con hielos, rompe con las reglas tradicionales que se conocían sobre esta icónica bebida, finalmente, la maison fue la primera en presentar esta fabulosa bebida al mundo en 1743, y desde entonces ha sido la reina de la elegancia y del sabor, y es quien determina las tendencias en cuanto a buen gusto y sabor. 

La historia de esta coqueta champagne se remonta a los años sesenta en Saint Tropez, un destino francés idílico y seductor, reconocido por robarse los corazones de actores, cantantes y grandes personalidades. Durante los mismos años, Acapulco era un imán para los artistas, y su belleza y clima fueron el escenario donde se escribieron canciones, poemas y hasta se filmaron películas. Estos dos destinos de playa, perfectos para descansar y consentirse, fueron la inspiración para que se inventara una champagne con hielos sin que perdiera sus deliciosas cualidades. 

Se logró encontrar una mezcla perfecta para que el champagne no perdiera su balance al servirse con hielo, que siguiera siendo elegante pero al mismo tiempo divertida, que llenara de estilo y glamour los días soleados en una playa o en una bella terraza. La forma ideal para servirla es con tres hielo en una copa Riedel, que por su forma especial potencializa los sabores de las uvas Pinot Noir, Meunier y Chardonnay.

Las miles de coquetas burbujas de Moët & Chandon Ice Impérial que se deslizan sobre el cristal de la copa, son una invitación para envolvernos en la expresión audaz, divertida e innovadora de esta champagne, convirtiendo los días de verano en momentos frescos y alegres. Sus cualidades nos invitan a un maridaje casual y espontáneo, con postres que incluyen frutas como durazno, mango y toronja, pero también con platillos adobados típicos de la cocina mexicana, como tacos al pastor y cochinita pibil, y con otros frescos como sushi, ceviches, aguachile y una tabla de quesos frescos. Moët & Chandon Ice Impérial Rosé, con su expresión fresca y vibrante, es perfecta para maridar con platillos picantes y con especias como cilantro y albahaca, con ceviche de camarón, tartar de atún con cubos de mango y pimiento, o postres con maracuyá, papaya. 

La burbujeante frescura de estas chapagnes únicas en el mundo, tienen el don de convertir cualquier lugar en un destino extraordinario, y su versatilidad y elegancia son la invitación para dejarnos llevar por nuevas sensaciones.

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APASIONADA DEL BUEN VIVIR