Magna Cata Riedel en Club 51
Las burbujas de la icónica Moët Imperial nos daban la bienvenida al Club 51, ubicado en los pisos más altos de la Torre Mayor, y reservados para los eventos más exclusivos de la ciudad, como la Magna cata Riedel organizada por Marcas de Lujo Asociadas by American Express, el primer club privado de México que reúne y hace alianzas estratégicas entre marcas de lujo nacionales e internacionales.
La elegancia y la privacidad de Club 51 fueron el ambiente ideal en el que se recibió a más de 150 de los empresarios más influyentes, reunidos para disfrutar de una exclusiva cata impartida por Maximiliam Riedel, quien es el CEO y líder de la 11va generación de la familia austriaca Riedel, que ha cambiado la forma de beber y de disfrutar del vino al diseñar copas específicamente para cada tipo de uva. Además de aprender de gran conocimiento vinícola, los asistentes fuimos parte de la presentación en toda América Latina de la nueva colección Riedel Performance.
La línea Performance, además de hermosa, es la primera en presentar un cáliz con un impacto óptico luminoso, que añade un agradable aspecto visual al cáliz y también aumenta el área de superficie interior, permitiendo que el vino libere sus aromas y los muestre completos, incluyendo sus más sutiles matices.
Los vinos elegidos para descubrir sus aromas cautivantes fueron Caymus, Emmolo y Belle Gloss de Wagner, The family of wine. Estos vinos crecen bajo el sol de California y son producidos con modernas técnicas, siguiendo estrictos controles de calidad, por lo que a nivel mundial son reconocidos como Premium, y han sido galardonados con 90+ pts. Robert Parker y The Wine Advocate.
La combinación de Riedel con los vinos Wagner es irresistible, pues con estas copas se descubre sin interferencias el carácter del sabor de Napa Valley, que por su clima y la calidad de sus terruños, hace que sus vinos tenga un estilo muy particular y seductor. Con gran admiración, los asistentes pudimos comprobar la diferencia enorme y el impacto que genera beber vino en un vaso de plástico o en una copa de vidrio común, en contraste con el placer que se genera al hacerlo en una copa Riedel.
Entre cada sorbo bebíamos un sorbo de agua mineral San Pellegrino, que al ser ligera y balanceada, es ideal para neutralizar los sabores que quedan en boca y contribuye a que el gusto no se sature. El agua San Pellegrino refresca al paladar y da una pausa entre cada prueba, preparándolo para disfrutar del siguiente trago o sin interferencias.
La perfecta transparencia del cristal y su forma específica, hacen que sean las únicas copas del mundo en las que se descubren los aromas seductores de frutas oscuras maduras de Caymus, el paladar suave, en capas, con especias exóticas y de rica carnosidad de La Belle Glos Pinot Noir, y se aprecia sin interferencias el hermoso cuerpo brillante y jovial de Emmolo.
Fue una noche de sorpresas y de placeres. Además de la presentación de la Performance, aprovechamos para festejar el 150 aniversario de Moët Imperial, la primera champagne que conquistó el mundo con su sabor delicado y coquetas burbujas.
W. riedel.com